Transitar el duelo es NECESARIO e implica el desafío personal de atravesar el gran dolor de la ausencia y restablecer el vínculo de amor que había antes de la pérdida, obviamente de modo distinto.
Culminar el duelo no implica separarse ni olvidar a quien murió, sino aprender a relacionarse con él o ella desde el recuerdo sano, aprender a vivir sin dolor y hasta encontrarle un nuevo sentido a su vida, volver a tener ganas de todo, hasta de vivir, que es lo que también se pierde.
En este proceso del Duelo la aceptación (no es estar de acuerdo, sino reconocer) de lo irreversible de la muerte es el principal obstáculo y además generalmente viene cargado de culpa y rabia.
Los vínculos no resueltos también son obstáculos para la aceptación, por eso es necesario, a veces, recibir ayuda profesional para resolver lo que provoca angustia, síntomas físicos y hasta enfermedades si no se resuelve.
El duelo es un proceso que deberá transitar indefectiblemente, que depende mucho de lo que la persona colabore más allá del tiempo y que así como tiene un principio debe tener un fin.
SE SUGIERE:
Contenido gentileza de:
Lic. Patricia Nieto Velasco
Psicóloga especializada en Situaciones de Crisis / Directora del Centro Vivir el Duelo
Por más información visite: www.vivirelduelo.com